?Tan efectivo es comer bien durante 48 horas seguidas y hacer un poco de ejercicio?
Pues, sí. !Ya he bajado un kilo, cien gramos!
Prometo mantener la calma, pero ésto anima mucho, no?
Ayer conseguí algo muy importante: no estar ociosa delante del televisor. Trabajo hasta las cinco de la tarde y después, generalmente, me marcho a casa. ?Y qué hago en casa...quizás leo, barro, friego, cocino, ordeno o cualquiera de las cien mil cosas que hay que hacer? Nada de eso, estoy muy cansada del trabajo, la tensión arterial se me baja, la cabeza me suele doler... PUES AYER, NO. Me organicé la tarde para hacer una visita primero, ir al mercado (galería comercial), solucionar asuntos del banco, cocinar para la cena y para un par de comidas más, tender una lavadora y doblar la anterior. No podría considerarlo hacer deporte, pero paseamos con el perro una hora. Me canso sólo de pensarlo, pero evité la vida sedentaria delante de la tele.
Voy a intentar expresar los problemas a los que creo que me enfrento en esta aventura:
1- La ansiedad.
Esta suele venir a partir de media tarde (cuando me engancha el televisor). Creo que hago mis comidas muy bien durante todo el día y, aunque no coma poca cantidad, después de la merienda, como si de la Sombra se tratara, el hambre se apodera de mi mente. Y digo hambre de hambruna, pero ?qué hambre voy a tener con lo que llevo comido? A mi edad ya me dejo ir. Me he dado cuenta de que, si no lucho contra la ansiedad, se va antes y total, devorar voy a devorar igual. Así que la solución es no estar sola en casa. !Bonita solución!
Pero ayer gané una batalla... A este paso gano la guerra.
2- Pereza para hacer deporte.
Soy capaz de andar bastante, así que andaré a lo Forrest Gump. Montaré en bicicleta (...algo). No tengo ningún gimnasio cerca (haberlos haylos, pero no de mi gusto... es que me pilla todo), así que haré pesas en casa. Bueno, quiero decir, levantar una barra, sentadillas (si las rodillas aguantan), fondos y poco más; abdominales y estiramientos. Aquí aplicaré mis conocimientos de ballet y un curso de yoga que me grabó mi hermana hace unos años y que, por supuesto, duerme en un cajón. PUES, SÍ QUE VOY A HACER COSAS, jeje.
Voy a intentar expresar los problemas a los que creo que me enfrento en esta aventura:
1- La ansiedad.
Esta suele venir a partir de media tarde (cuando me engancha el televisor). Creo que hago mis comidas muy bien durante todo el día y, aunque no coma poca cantidad, después de la merienda, como si de la Sombra se tratara, el hambre se apodera de mi mente. Y digo hambre de hambruna, pero ?qué hambre voy a tener con lo que llevo comido? A mi edad ya me dejo ir. Me he dado cuenta de que, si no lucho contra la ansiedad, se va antes y total, devorar voy a devorar igual. Así que la solución es no estar sola en casa. !Bonita solución!
Pero ayer gané una batalla... A este paso gano la guerra.
2- Pereza para hacer deporte.
Soy capaz de andar bastante, así que andaré a lo Forrest Gump. Montaré en bicicleta (...algo). No tengo ningún gimnasio cerca (haberlos haylos, pero no de mi gusto... es que me pilla todo), así que haré pesas en casa. Bueno, quiero decir, levantar una barra, sentadillas (si las rodillas aguantan), fondos y poco más; abdominales y estiramientos. Aquí aplicaré mis conocimientos de ballet y un curso de yoga que me grabó mi hermana hace unos años y que, por supuesto, duerme en un cajón. PUES, SÍ QUE VOY A HACER COSAS, jeje.
Para finalizar contaré mi dieta de ayer. A ver si me entero de cómo se puede poner un cuadrito aparte con estos datos para que el post no quede demasiado largo.
-Desayuno a las 6:30 a.m. Una fruta (melón), tostada con aceite y jamón ibérico, yogurt blanco con miel, canela, piñones, frambuesas y cebada (mi marido me la comprado hinchada y está mucho más super rica). Y un delicioso café (no le eché azúcar, snif...).
- Almuerzo a las 10:30 a.m. Una paraguaya, nueces, un higo seco, queso batido (tampoco eché azúcar) y café (qué no, qué sin azúcar).
- Comida a las 13:30 p.m. Pasta (integral y ecológica) con brócoli al vapor (tan verdecito), atún al natural (de lata), aceite y otra paraguaya.
- Merienda a las 17:30 p.m. Y vuelta la paraguaya (ya sólo que dan dos en casa) y una ciruela.
- Cena a las 21:00 p.m. Aquí llegue con más hambre que los pavos de Manolo, pero había ido bebiendo agua para calmar la ansiedad y como había estado haciendo tantas cosas, pues pude controlarme. Tomate picado con cebolla, ajo, sal, vinagre y aceite. Y de proteína sardinas en aceite (ecológicas y de lata) y atún al natural (cómo no, de lata)
- Precama a las 11:00 p.m. CHOCOLATE, negro, 70% cacao. Cómo me lo había ganado! Cómo lo disfruté! Qué onza más maravillosa!
No hice ejercicio, salvo el paseo perruno al atardecer.
A ver si puedo subir fotografías, que ésto está muy soso.
Pido disculpas por los signos de interjección y de interrogación; la tableta desde la que escribo sólo tiene los de final de frase. Y por las faltas de ortografía que pueda cometer.
Hasta mañana.
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Gracias por vuestro tiempo y por escucharme.
Espero ser de ayuda también a otras personas.