sábado, 31 de enero de 2015

Terapia para adelgazar 31-1-15

   Participo en un grupo de "hábitos saludables". Es un grupo promovido por nuestro sistema público de salud. Por un lado se nos darán pautas sobre nutrición y vida no sedentaria y, por otro lado, contaremos nuestros problemas concretos.
 
   Lo que más me gusta de esta historia es que el sistema sanitario entiende que hay personas que tenemos un problema, que no somos vagos, glotones o personas dejadas que no se cuidan. Que somos personas con una enfermedad, que bien desde chiquitas teníamos sobrepeso y nadie supo qué hacer, o bien un día empezamos a engordar y no podíamos controlar nuestro cuerpo. Una vez un médico me preguntó:
- ¿Has tenido siempre este sobrepeso?
- No (le contesté).
- ¿Intentas controlar la comida para adelgazar?
- No, intento controlar la comida para engordar poco. Porque no consigo parar de engordar... de adelgazar ya ni hablamos.
Por aquel entonces, el médico me miró y se encogió de hombros. Hace 20 años, las cosas eran diferentes. El propio médico tenía obesidad.
 
   Bueno, mi primera participación será el martes 3 de febrero. Pero esta semana he tenido una entrevista con la nutricionista. Me ha pesado y me ha medido. Según su báscula y su cinta métrica (ambas medían mal) peso 79 kg (vestida y con zapatos) y 104 cm de cintura (era retención de líquidos seguro).
 
   Me preguntó si comía, al menos, una ración de fruta o verdura al día. Una no, seis o siete. A veces tengo complejo de orangután. También me preguntó que si andaba, al menos, media hora diaria. En general ando bastante más, pero es verdad que no todos los días. Hay días que, a consecuencia del trabajo, no realizo prácticamente movimiento alguno. Esto ya he empezado a cambiarlo. Es más, lo anotaré diariamente en un cuaderno específico sobre esta nueva etapa en el adelgazar. Además, llevo tres semanas sin correr, el frío espantoso, un resfriado y las escusas propias del momento. Al menos he seguido con un día a la semana de pesas.
 
   Prometo contar todo lo que aprenda. 
 
 
   Aquí dejo una linda fotografía de este otoño pasado en los Pirineos, en el valle de Estós. El camino es largo, aunque eso nunca se sabe. El camino es estrecho, pero suficiente. Pero sobre todo, el camino es precioso.
 
 
 
 
 
Besazos.






 

sábado, 24 de enero de 2015

Empezamos a adelgazar 24 - 1 - 15

Después de varios meses dejadita de la mano de Dios hay algo diferente:
El lunes 26 de enero empiezo con un grupo de terapia para controlar la comida y adelgazar.
Bueno, ellos lo denominan para adquirir hábitos saludables.
 
Durante estos últimos meses he asistido a un grupo de terapia para controlar la ansiedad. La verdad es que poca ansiedad he controlado. Con respecto a la comida he tenido mis días buenos y mis días malos, pero con respecto a la vida, la verdad es que he tenido, y tengo, los mismos días que durante los pasados 47 años. Supongo que cada uno es como es y que es mejor aceptar las limitaciones de cada uno que luchar contra ellas. Creo que es menos cansado y más productivo.
 
Contar que durante los dos últimos meses he empezado a correr más en serio. He llegado a correr 45 minutos por el campo, con esfuerzo, pero con relativa facilidad. He dedicado algunos días al trabajo con pesas en casa. Todo ello, y algún control que otro sobre la alimentación, han hecho que la gente me diga que estoy más delgada y que yo también me vea no solo más delgada, si no con las carnes más prietas (jajaja, ¡qué expresión más antigua!).
 
¿Y qué opina la báscula? La báscula es una señora súper cabezota que insiste en que peso 77 kilos, 76,5 kilos o incluso 77, 5 kilos, depende del día.
 
Bueno, me siento más fuerte y mis piernas están más duras. Tengo menos trasero, eso es verdad. Y el "michelín" delantero ha disminuido. Pero el contorno de la cintura, a la altura del ombligo, sigue con apenas dos centímetros menos. Los brazos tienen menos volumen, pero se está quedando una especie de pellejo colgandero.
 
Espero poder contar cosas interesantes de mi primer día de terapia. Estoy ilusionada.
 
Me he vuelto a apuntar a una marcha de 100 km en junio. Esta vez la termino.
 
Besos para todos los que acaban lo que empiezan y para todos aquellos que vuelven a empezar.